Traductor

Buscar en este blog

domingo, 18 de agosto de 2019

Salvini proclama su victoria

El caso de los 107 migrantes que permanecen en el Open Arms, y que llevan dieciocho días esperando puerto donde poder atracar, se complica. En la isla italiana de Lampedusa, el primer ministro italiano no quiere ni verlos. Sólo han dejado los italianos desembarcar a los más jóvenes, a los menores de edad. Ante esta situación, el presidente español en funciones, Pedro Sánchez, ha ordenado que se habilite el puerto de Algeciras y al capitán del barco, que navega bajo bandera española, que se dirija a este puerto, donde se acogerá a los migrantes.

Los del Open Arms dicen que nones, que la situación en el barco es indescriptible, tanto que se puede producir un motín a bordo. Cinco días de navegación de Lampedusa a Algeciras es demasiado tiempo. Los de la ONG dueños del barco, insisten ante las autoridades italianas para que autoricen el atraque y el desembarque. Ahí estamos.
Momentos, sin duda, de gran tensión en el barco y entre los gobernantes españoles e italianos. Sánchez ya ha anunciado que demandará a los italianos ante las instituciones europeas. Los italianos, que si quieres arroz Catalina. No van a permitir, al menos hasta el momento, que el barco atraque en Lampedusa.
Sánchez, por su parte, ha vuelto a contradecirse. Después de la primera que hizo con la operación llamada, para afirmar y mantener después que los puertos españoles no iban a ser el paradero donde se recogieran los migrantes. Vamos que hay más puertos en Europa, no sólo los españoles. Pero, ante la crisis humanitaria que se le plantea a los migrantes recogidos por el Open Arms y la negativa, principalmente italiana de agogerlos, Sánchez ha optado por dar una vez una "lección moral" a Europa, habilitando el puerto de Algeciras.
Vale, a lo hecho pecho. Pero ya de hacer algo, que lo haga bien, coñe. Que nos diga si la Unión Europea le ha prometido algo o, más claro, cuánta pasta le van a dar a España por este acto humanitario. Y, por otra parte, joer, que cuente con las autoridades andaluzas, al menos por cortesía. Si hubiera ordenado al barco dirigirse a Cataluña, por ejemplo o a Valencia, seguro que otro gallo nos hubiera "cantao". Así que las coma con patatas Moreno Bonilla.
Desde luego, las críticas ya le llueven al socialista Sánchez. Además del Gobierno andaluz, prácticamente toda la oposición critica la comodidad e irresponsabilidad de Sánchez de dar órdenes desde la poltrona de Doñana. Y el italiano Salvini sonríe: !Quien resiste vence!. El italiano proclama públicamente su victoria sobre Sánchez.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentar con respeto