Los rectores fasscistas de Cataluña

No son los mayores responsables los estudiantes. No. Ahí hay unos indecentes rectores, que de universitarios no tienen nada. Son unos funcionarios públicos, y como tales deberían ser un verdadero ejemplo de los cumplidores de la Ley. Pero como son unos mierdas independentistas tienen que desobedecerlas, las leyes, digo. No solo habría que destituirlos –ya que ellos no se van- de manera inmediata, sino que la Fiscalía debería ver si su actuación no es, cuanto menos, delictiva. Los alumnos que los siguen y acompañan en este delito tienen su culpa, su grandísima culpa. También contra ellos la fiscalía debería actuar.

Es que se está implantando en las universidades catalanes el imperio de unos pocos, protegidos por rectores –que de magníficos no tienen un pelo-, que están imponiendo su ley a los demás alumnos, con el “pacifismo y democracia” de los indepes, cada vez más violentos, cada vez más inmunes. No se trata ya de que no permitan –cuando pueden- la asistencia o no a las clases a alumnos y profesores, que están en su derecho. Se ha pasado de la fuerza de los piquetes a la violencia de los cederrés. Ahora ya no se puede asistir a las clases, porque unos pocos están arreando puñetazos –tal cual- a cualquier alumno que intente recibir la enseñanza universitaria.

De la violencia de las calles estos indepes de mierda han pasado al abuso y a la imposición por la fuerza bruta a los universitarios que han pagado su matrícula, a los universitarios que nos cuestan un huevo a todos los españoles. La violencia y las agresiones en las universidades catalanas es un hecho. Lo peor que estos malnacidos están alentados y protegidos por los rectores, impresentables ellos; verdaderos delincuentes las autoridades universitarias. ¡Que se vayan por vergüenza o que los echen por sinvergüienzas!

Son unos impresentables, los unos y los otros. Para que se manifiesten y ejerzan la violencia los unos, los rectores, dan carta libre a los otros, que se pueden examinar cuando les venga en gana, sin contar su asistencia y su sapiencia. Estos progres indepes, que se muestran contrarios a las dictaduras, siguen el ejemplo de Franco, que se erigió en rector primero y magnífico concediendo carreras a los combatientes patrióticos de la Cruzada en la Guerra Civil. ¡Que ni “·calcao”! Ellos son los fascistas.

A Sánchez esto se la suda. Y, miren por dónde, ya tendría que haber intervenido para poner fin a este desmadre universitario; bueno, de los rectores fascistas de la Universidad catalana. Pero, el de laPesoé anda a lo suyo, a las elecciones del 10N. Lo demás se la suda. No quiere mover ficha, por un por si acaso, necesita de los indepes para formar Gobierno. Aunque parece que no le va a hacer falta. Su amigo del alma, compañero socialista, Tezanos, le ha dicho que tranqui. Desde el Centro de Investigaciones Sociológicas le un montón de diputados, dejando para el arrastre a los peperos. Así que, nada, Tezanos se vuelve a sacar una macroencuesta de debajo de la chistera para proceder a la movilización de las izquierdas. ¡Y no se ha comenzado a vender el “pescao”!

Menos en Bélgica, que ya ven –como decíamos ayer-, el tribunal belga que se ocupa de la euroorden del juez Llarena –que es el mismo que vio el caso de elPuchi- se resiste a entregar al delincuente expresidente de la Generalidad catalana. Hasta mediados de diciembre no verá el caso. Para entonces elPuchi puede estar en cualquier sitio, menos en Bélgica o España. No lo entendería el Gobierno español que Bélgica no entregue a elPuchi. Nadie lo entendemos, y menos que Sánchez no reaccione. Ya lo decíamos antes y repetimos: con amigos como esos belgas no nos hacen falta enemigos.