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jueves, 7 de noviembre de 2019

Coladura sin frenos

No es broma, no, la proposición que han aprobado en la Asamblea de Madrid, a propuesta de Vox, los tres partidos de la derecha, los de Abascal, Peperos y Ciudadanos. Nada más ni nada menos que proponer al Gobierno de España la inmediata ilegalización de todos los partidos políticos que "atenten contra la unidad de España". Es decir que Sánchez utilice todos los instrumentos legales a su alcance o "proceda a las reformas legales que habiliten a ello". La proposición, es lo más seguro, no irá a ninguna parte. Pero ahí queda.
No obstante, sí que se pueden sacar conclusiones muy importantes de este hecho. Los partidos de la derecha se han unido para sacarla adelante en la Asamblea de Madrid, que no es un lugar cualquiera, y han sido los de Casado y los de Rivera quienes han apoyado sin cortapisas la proposición no de ley de Vox, partido al que los del ala contraria califican de extrema derecha. ¡No será para tanto!
Por contra los partidos de la izquierda, tanto laPsoé, como Unidas/Unidos podemos -liderados por el ultraizquierdista chavista-proiraní y prosoviético-comunista, elPabloManué- han mostrado lógicamente su rechazo. A ellos se ha sumado el partido Más Madrid, liderado, ya saben, por el traidor del siglo, pero el igualmente chavista, el que apuñaló por la espalda a elPabloManué y el que recibió una beca de la Universidad de Málaga, de mil ochocientos euros al mes durante un año por un trabajo de investigación, del que nunca se supo, como no se volvió a saber del dinero de la beca que no devolvió. ¡Menudo ejemplar!
Ilegalizar todos los partidos que atenten contra la unidad de España. Eso es, en definitiva, lo que dice la moción, que lleva calado de fondo. No es tan baladí, como pueda parecer en principio, la proposición. Ya sabemos todos quiénes son esos partidos, comenzando por los CeDerrés, para los que la proposición pide que en la Unión Europea lo declaren como banda terrorista y lo incluya en esas listas europeas de delincuentes terroristas. Pero, en ese "todos" se incluyen los nacionalistas separatistas de la comunidad autónoma española de Cataluña y los de las provincias vascongadas, como los etarras de Bildu, incluso el de laPeNeuve, que ya se lo dijo el voxero Smith a Aitor Esteban en un programa de teuve, ante el público allí presente y los miles de telespectadores -que yo lo vi y lo oí-: "como podamos, a vosotros os ilegalizamos". Pues, ojo al dato, que la proposición de la Asamblea de Madrid también va contra ellos, evidentemente.
Sin embargo, el calado del fondo al que me refería es más profundo: hay que entender de la proposición que ese "todos" son todos. Así que, atención, porque también es, a modo de advertencia, contra el partido del propio presidente del Gobierno en funciones, o contra él directamente. Una advertencia, digo, contra su nación de naciones o su España plurinacional. No digamos ya contra los podemitas-comunistas y el Más País, del pánfilo Errejón.
Ya digo, la proposición no es una broma. Tiene su fondo, su calado y sus destinatarios. La pregunta ahora es si tanto los peperos como los ciudadanos se han percatado de ello o los de Abascal se la han colado doblada.

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