Golpista y ladrón

Estaba visto, aunque todavía no está demostrado, pero, no tengan duda de que se demostrará, que elPuchi no podía darse esa vida de muy padre y señor mío sin una buena cantidad de pasta, mucha pasta. Lógicamente de algún sitio tenía que salir y no, precisamente del trabajo y sudor de la frente del golpista, que de eso del trabajo peca de ignorancia. Y velahí que la Guardia Civil y un juez ya andan tras el asunto. ¡Que es que no podía ser! Tanto casoplón en Bélgica y tanto viaje y tanta leche sin que el vago golpista hiciera algo para generar riqueza.

Coñe, como pensara hacer lo mismo con la república independiente que pretendía, y que la república no existe, imbécil, pronto acababa con las reservas, si es que las iba a haber algún día. Pues, nada, que el dinero con el que se mantiene el gorrón de elPuchi procede, lo más probable, de subvenciones de la Diputación de Barcelona destinadas a entidades orientadas hacia la cooperación internacional. Pero, que nadie sabe cómo ha sido ni a dónde se han ido dos millones de euritos.

¡Ahí están, ahí están! ElPuchi, cuando se le va acabando la pasta, pide de cien en cien mil euros, que la vida está muy cara por Bruselas, y los vicios se pagan más caros todavía. Que es que aprendieron muy deprisa los golpistas de los socialistas en Andalucía, pues mientras estos hacían montón con los dineros destinados a los parados -¡Hasta como “pasá” una vaca!- los golpistas lo amasaban de las subvenciones fraudulentas de la Diputación barcelonesa. Oigan, que parece mentira, pero aquí el que no corre como un AVE, vuela. Y menos mal que muchos catalanes se están dando cuenta de quiénes esos esos tramposos ladrones, a los que solo mueve el dinero. Son los golpistas, al fin y al cabo, unos verdaderos mafiosos.

Están cayendo en picado estos violentos-terroristas de la rebelión de las sonrisas. Así lo demuestra el último sondeo del Centro de Estudios de Opinión (CEO), catalán, algo similar al Centro de Investigaciones Sociológicas: los partidarios en Cataluña de la independencia son el 41,0%, mientras que los que no la quieren se sitúan ya en el 48,8 por ciento. Por tanto, ya pueden ir tomando nota los golpistas y el gobierno de “los progresistas” de Sánchez.

Miren cómo se han dado de la prisa elPedroQué? y el de la ultraizquierda chavista-podemítica para llegar a un acuerdo, o preacuerdo, con fraternal abrazo incluido. ¡Qué no maquinarán estos dos lebreles! El caso es que el mundo empresarial y el de las finanzas están por ahora un pelín más que “acojonaos”. Todavía no han comenzado los progres a aplicar desvaríos y ya anuncian el “saqueo” de la hucha de las pensiones, para que los jubilados puedan, aunque solo sea, comprar una librica de turrón estas Navidades. Así que ya se pueden ir haciendo una idea de lo que se nos viene encima.

Ante todo este despropósito, ante todo este desvarío, el pepero Casado parece como que passssara. Primero fueron su portavoza en el Congreso, Cayetana dÁlvarez de Toledo, y el presidente de la Junta gallega, Feijóo, quienes alzaron la voz para hacerse oír pidiendo a Sánchez un pacto de Estado. Ahora parece como que se hubiera quedado solo ante el abismo el presidente gallego, convertido en adalid de un posible pacto con Sánchez, siempre que este se olvide de elPabloManué, lo cual no sería nada de extrañar, por los cambios intempestivos a los que nos tiene acostumbrados el socialista. A cualquier hora.

Claro, claro que se echa de menos la presencia, la voz y la exigencia de Casado. Si no pudo hablar con Sánchez en la misma noche electoral, porque el socialista estaba muy ocupado, se insiste ante los medios de comunicación, que esos se lo harán llegar a Sánchez y, si no, denunciarán que el socialista no ha querido un pacto de Estado y ha preferido pactar con los podemitas, independentistas, golpistas y terroristas. Ahí ha perdido de nuevo Casado una gran oportunidad para demostrar quién es el líder de la oposición y quién podría ser el futuro presidente de Gobierno.