Zapatero y Otejjji, a los altares

Definitivamente, hay que reconocerlo y asumirlo, el expresidente del Gobierno de España José Luis Rodríguez Zapatero, elCetapé, está más para allá que para acá. El hervor que siempre le faltó se agranda peligrosamente con el paso de los años, en especial para su salud mental. ¡No te digo! Insiste el payaso en que el terrorista Otejjji, elGordo, es tan honorable -un hombre de paz, decía entonces elCetapé cuando le correspondió gobernar, un hombre bueno-, que prácticamente, lo quiere elevar a los altares. Resulta que sin la intervención del terrorista no se habría logrado el fin de la violencia de la banda asesina. Ni más ni menos.

El expresidente, al que ni los chavistas quieren ya como intermediario en Venezuela -por inepto- ha calificado de decisiva la contribución del etarra para "poder ver el final de la violencia" etarra. No dice tan siquiera elCetapé el fin de los asesinatos de ETA. Ya les digo, elGordo, un santo. Carecen de importancia los ciudadanos que se opusieron y sufrieron la barbarie de los hombres asesinos de la banda de elGordo. Algunos de estos ciudadanos -incluso pertenecientes a laPesoé- fueron asesinados y sus familias -víctimas también- vilipendiadas y humilladas y perseguidas. Pero estos, ya digo, no tienen importancia, ni tan siquiera el miserable elCetapé los mienta, como para recordarlos, a ellos y a sus familiares.

Tampoco tuvieron importancia los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, a lo que se ve. Sólo y únicamente elGordo etarra es importante. No se ha enterado todavía -no le da para más- el expresidente socialista de que fueron los que se opusieron a los asesinos y quienes los combatieran en una lucha policial sin tregua los que acabaron con la banda mafiosa y asesina. Ellos y solo ellos contribuyeron decisivamente en el arrinconamiento de los asesinos y que estos fueran derrotados. Lo demás, son blanqueamientos que pretende elCetapé, pero, eso, ni con con cal viva. ¡Que no nos cuente milongas!

Fíjense, se alegra el expresidente socialista de que los etarras de Bildu participen en las instituciones democráticas. ¡Salvajada al canto! En otro país -como por ejemplo Alemania- esta banda mafiosa, como los golpistas catalanes -clanes igualmente mafiosos- estarían ilegalizados. Pues, ya ven, elCetapé tan contento. Está, además, entusiasmado porque se va a volver a reunir algún día con elGordo, al que tanto ama y tanto admira. Eso sí, ha recordado que cuando se reunió la primera vez con el pistolero le instó a que tenían que "asumir la culpa" y "sentirse más cerca del dolor de las víctimas". ElGordo, la evidencia lo delata, ni puñetero caso, por un oído le entró y por el otro le salió; como el que oye llover, vamos. El mismo caso que los venezolanos chavistas. Son las dotes de este hombre, que un día, por desgracia, fue presidente del Gobierno de España, durante casi diez años, los suficientes como para dejar el país hecho unos zorros.

Este hombre no puede ir por ahí diciendo tonterías, puras majaderías e imbecilidades, más que nada porque fue presidente de España, y ya saben lo de la mujer del Cesar. Alguien tiene que hacerlo callar. Una manera muy sutil sería que conociéramos los acuerdos a los que llegó con la banda terrorista, con elGordo; más bien que conociéramos qué le ofreció a los etarras, que no por eso dejaron de matar, porque ya estaban arrinconados, controlados, acorralados y reducidos policialmente. Porque todavía es más grave, cuando todo eso sucedía, cuando ya ni asesinar podían los terroristas aunque lo pretendieran, el que elCetapé les diera algo, que se lo dio. Pero, quien pudo revelarlo, el pepero Rajoy, se plegó a los acuerdos de elCetapé con la banda armada; de hecho, ahí está la visita -que quedará para la historia- del ministro de Interior pepero -Jorge, Fernández Díaz- al domicilio particular del expresidente socialista.