La suerte se alía con los delincuentes

La suerte se ha aliado con los delincuentes catalanes. Ya lo ven. Así tal cual. Como quien dice, los demás viéndolas venir, viéndolas llegar  y sin beneficio alguno. La última, pues que el delincuente y chorizo expresidente de la Generalidad catalana, el muy exhonorable Yordi Pujjjol no tendrá que pagar a la Hacienda pública más de ochocientos mil euros en impuestos por los millones -el fotunón-, más de trescientos de los de euros- que se le descubrieron en una cuenta en Andorra, de esos millones que su hijo, el yunior como gustan llamarlo en familia, sacaba de España escondidos en bolsas de basura. ¡Vaya basurilla!

Sí, sí, eran millones de euros del muy exhonorable, por más que pretenden  los independentistas lavarle la cara al chorizo, achacándole la propiedad de los mismos a yunior. Algo le tocaría al primogénito y a todos los miembros de la "sagrada familia", pero la propiedad era del vejete, que bien se encargó de dejar por escrito y manifiesto que, en caso de fallecimiento, pasarían a su esposa, Marta Ferrusola, la matriarca, la auto denominada "madre superiora" en el lenguaje católico, apostólico y romano que la familia de los Puyoles utilizaba para entenderse con los banqueros andorranos.

La familia de "el padrino catalán" funcionaba y se movía como una verdadera "sociedad mafiosa". Y como tal, se las sabían todas. Miren hasta dónde se las sabían, que han logrado estirar el asunto pecuniario hasta llegar a que prescriba. De lo Penal, ahí siguen. Por eso, a los trescientos y pico millones de euros, cuya procedencia, lo más seguro, es que lo sean del famoso "tres por ciento", habrá que sumar los ochocientos mil euros que no pagarán a la Hacienda española. Vamos, que en "comparanza" no es mucho, pero todo suma y a nosotros nos resta.

Otro chorizo expresidente de la Generalidad, y muy exhonorable, también ha sido tocado la suerte. Ya se lo imaginan, El delincuente elPuchi ha sido acogido por la Eurocámara, a raíz de una sentencia del tribunal de Luxemburgo que concedía la inmunidad, a toro "pasao", al también delincuente Yunqueras, que está en prisión por golpista. Muy probablemente sea el único que no se beneficie de ese dictamen del Tribunal Europeo.

El Tribunal Europeo se saltó la ley española que obliga a los elegidos parlamentarios a acatar la Constitución. La obvió, se la pasó por el forro. Siguiendo el ejemplo, el Tribunal Supremo español haría estupendamente con saltarse el dictamen del Tribunal Europeo, y tal como hicieron los tribunales alemanes y belgas ignorando por completo la euro orden cursada por el juez español Llarena, que solicitaba la detención y extradición a España de los delincuentes elPuchi y Comín. Si hubieran cumplido con su obligación, nada de estos estaría sucediendo. Solo hay que hacer lo que se ve. Ejemplo tibi.

Esperando estamos todos el informe de la Abogacía del Estado para ver si pide o no la excarcelación del delincuente Yunqueras para ir a Bélgica a tomar posesión del cargo como eurodiputado. O, lo que es peor, la nulidad del juicio. Los golpistas esperan esa petición como agua de mayo para seguir conversando con laPesoé, para la investidura de Sánchez. Pero, aunque dicen que no, siguen "dialogando" es mentira. Solo faltaba que el Supremo, la sala del juez Marchena le hiciera caso a un abogado a las órdenes del Gobierno de Sánchez. Ahora que todo puede pasar, como sucedió en el juicio contra los golpistas en el que la Abogacía del Estado cambió la calificación de rebeldía por la de sedición, y eso dictaminó el tribunal de Marchena.

Menos mal que la Fiscalía -a la que ni puto caso hizo Marchena- se mantuvo firme y consideró que había habido rebelión, como lo sigue manteniendo; es más ha solicitado al juez instructor, Llarena, que mantenga en vigor las euro órdenes contra los golpistas huidos y que se solicite que entre en vigor la inhabilitación de Yunqueras y se pida que se levante la inmunidad para los dos golpistas que han tomado posesión del cargo en Bruselas, a sabiendas los de la Eurocámara que están dando cobijo a dos delincuentes, que atentaron contra la integridad de un Estado miembro de la Unión.