Ni la Unión se interesa por sus propias resoluciones

Ala, unos por otros, la casa sin barrer. Y nosotros seguimos sin enterarnos de lo que en realidad sucedió la noche del 20 de enero, en la T-1 del aeropuerto Madrid-Barajas Adolfo Suárez. Ni se recuerdan ya las versiones que sobre el hecho ha dado el ministro de los Transportes y secretario de Organización de laPesoé, Ábalos. Lo único que sí nos queda claro es que hizo "un gran servicio a España", en palabras del mismísimo omnipresente elPresiSánchez, y que, por tanto, se daba por zanjado el asunto. O sea, lo dijo Blas, punto final. Todo transparente.

Los peperos y Ciudadanos pidieron al Parlamento Europeo un debate sobre lo acontecido aquella "tenebrosa" noche en Barajas, con el fin de que fuera la Comisión Europea la que investigara lo acontecido, ya que afectaba a resoluciones de la propia Unión Europea. Es decir que es la propia Unión la que tiene "fichados" a veinticinco altos cargos del gobierno venezolano, entre ellos a la "dulce Dency", acusada de crímenes de lesa humanidad, y que fue, precisamente, su presencia en espacio aéreo español, primero, y en suelo español-europeo, después, el origen de todo el follón.

Pese a que un principio el ministro Ábalos negó cualquier tipo de entrevista con ella, tuvo que admitirla después; no solo en el avión de la venezolana, número dos del comunista Maduro, sino otra más, al menos, en una zona vip de la T-1. Ha dado el ministro más de cinco versiones del encuentro. Más tarde se ha sabido que Sánchez y la venezolana mantuvieron una conversación telefónica y que ésta exigió a Sánchez, entre otras cosas, que no recibiera a Guaidó, como así sucedió. Pero, todavía tampoco se ha aclarado qué contenían unas cajas que se descargaron del avión de la venezolana. Y ahí estamos, esperando.

Así que, llegado el día, el Parlamento Europeo debatió en Pleno el caso de la "dulce Dency". Más bien los europarlamentarios españoles debatieron en Pleno sobre el caso español. El alto representante de Exteriores la Unión, el hasta hace poco ministro Borrell, mandó a hacer los deberes a los europarlamentarios de Ciudadanos y de laPepé -vayan a estudiar, les dijo, mientras que la europarlamentaria pepera, también exministra, acusó a laPesoé de "abrir las puertas de Europa a los bolivarianos". Al final, un debate que terminó en agua de borrajas, en el que se concluyó que era el país soberano donde se producía en hecho similar el que tenía que estudiarlo e investigarlo.

Coñe, pero resulta que el Pleno del Congreso de los Diputados ha cerrado toda posibilidad de creación de una comisión para tal efecto. Y no se ha creado, porque laPesoé, junto a sus socios los comunistas, los republicanos catalanes, los de laPeneUve- los que siempre traicionan- y los etarras se han opuesto a ello, frente a los peperos, Ciudadanos y los de Abascal.

Todo en el mismo día en el que se debatía y se daba luz verde a la liberalización de la eutanasia. Mientras el portavoz comunista, Echenique, exponía las razones de su apoyo a la mencionada Ley, alguien desde el Hemiciclo le gritó "Parece mentira que tu defiendas eso". Inmediatamente el comunista Iglesias preguntó con soberbia irrefrenable que quién era el que había dicho eso. Ojo, porque luego lo apunta en la libreta el podemita. Así comenzaron cosas muy graves.