Una sociedad "adultocéntrica"

Esto es como el cuento de nunca acabar, lo del "señor Lobo", que así es como se le conoce ahora al ministro de los Transportes. Que nunca mejor dicho, se lo ha cargado todo él solito. El marrón de la "dulce Delcy", la comunista venezolana, acusada por la Unión Europea de crímenes de lesa humanidad. De las incógnitas que  quedan por esclarecer de su llegada a España todavía no se ha resuelto quién autorizó que su avión sobrevolara espacio aéreo español y, posteriormente,  que aterrizara y ella pisara nuestro suelo patrio.

Como que todavía no se sabe a ciencia cierta -ni incierta- qué se le había perdido en nuestro país. Ya sabe, que si quería entrevistarse con el comunista elPabloManué, que si entre ambos querían hacer la envolvente al presidente del Gobierno de España, Sánchez, para que estuviera presente en ese encuentro entre amigos; luego, que si lo que pretendía era "acochingar" a Sánchez para que se dejara de investigar la procedencia de los dineros del partido de su socio, el podemita. Porque éste podría haber recibido suculentas subvenciones de Venezuela, Irán, Bolivia y Rusia.

Un dinero, todo él, a fondo perdido. Que miren por dónde, esa podría ser una de las razones, quizá la principal, para que la "dulce Delcy" se empeñara en aterrizar en España: quería ver a elPabloManué. Entrevistarse con él, y nada más, que no era poco. Pero, fue elPabloManué el que no quería verla a ella, porque el solo hecho de mantener una entrevista con ella, después de entrar en España como entró, lo único que lograría laDelcy sería complicarle la vida ante su socio en el Gobierno, elPresiSánchez. Así que la venezolana quería cobrarse favores del podemita y lo único que logró fue tener que marcharse descompuesta y sin novio.

A todo esto, el desaparecido ministro de los Transportes, además de jorobarse sin descansar hasta altas horas de la madrugada se comió todo el marrón del "caso Ábalos". Tuvo que ir, de noche hasta Barajas, en un vehículo particular, para decirle a laDelcy que lo que tenía que hacer era marcharse, porque por mucho que esperara, elViceDos de Sánchez no la iba a recibir. Lo que no se imaginaba el de los Transportes es que el caso, que posteriormente llevaría su nombre, tendría la trascendencia que ha tenido y seguirá teniendo. Poca imaginación la del ministro, al que ya le ha costado un verdadero escándalo y su retirada temporal de la vida pública. Y esto no ha terminado todavía. Ni mucho menos.

El que se está salvando del escándalo, por los pelos, es elViceDos. Ha tenido que renovar sus votos ante Sánchez del mantenimiento de su inquebrantable lealtad. Le ha asegurado a Sánchez que él no ha tenido nada que ver en el "caso Ábalos". A Sánchez sólo le queda creérselo, o no. Hasta mayores y evidentes aclaraciones que refuercen esa lealtad del comunista.

Entretanto, la que no deja de decir paridas, pese a ser ministra, es la compañera del podemita, su compañera del refugio de Galapagar, el de los seiscientos mil euros. Aunque, eso sí, ambos dos llevan en sus henchidos corazones el recuerdo de sus compañeros y amigos, a los que tanto quieren y tanto aman, los del barrio de Vallecas. Así que todos tranquilos. Enseñarán y educarán a sus retoños en el más puro estilo comunista-proletario. Seguramente en algún colegio privado. Ya llegará su tiempo.

Pues eso, que decía la ministra Irene "Montera", cuyo mayor mérito para serlo es ser la compañera de elPablomanué, que la "sociedad es muy adultocéntrica", refiriéndose a que es necesario permitir el voto a los jóvenes de dieciséis años. ¡Joér con la analfabeta! Como siga a ese ritmo, cuando termine la Legislatura, habrá terminado ella con la Real Academia Española de la Lengua. Es muy productiva en "palabros" con su lenguaje inclusivo e imbecilidades; además, que es que no se corta. Ya se sabe la ignorancia y el analfabetismo tanto monta, monta tanto- son osados.