De los bulos y trolas del Gobierno, al General Santiago

Vamos a ver, y que quede claro como ejemplo, lo que es un bulo, que pueda ser considerado delito, para que luego no se lleve nadie a engaño, cuando los agentes del orden rastreadores de redes sociales lo localicen. Un bulo de gran peligrosidad -por tanto grave delito- es que alguien difunda por las redes sociales que ya hay vacuna contra el coronavirus y que, por cuestiones diversas, principalmente comerciales, no quieren las autoridades aplicarla; bulo es también el que alguien comunique a través de las redes que hay un producto equis con el que se puede curar el coronavirus.

Eso dice el ministro de los Interiores que es lo que se puede considerar un bulo, perseguible y llegar a ser constitutivo de delito. No calibra Marlaska, no. El hombre se hizo famoso como juez a causa de ETA y por lo mismo cayó en picado, hasta llegar a ser ministro. ¡Paradojas de la vida! Y como ministro no da una "alderechas". Porque, entendámonos, coñe, cuando abrimos internet y vemos noticias -o no- en las que nos indican que si ponemos ajos en agua al lado de la cabecera de la cama vamos a sanar de muchas cosas, o similares, eso, según el ministro Marlaska sería un bulo -hasta constitutivo de delito-, o cuando el famoso curandero de Trabazos asegura que con su brebaje cura el cáncer -que no lo cura- eso también es constitutivo de delito.

Marlaska se piensa que somos tontos. Pero, yo creo que no somos tontos. Todo viene a raíz de las declaraciones realizadas esta mañana por el Jefe del Estado Mayor de la Guardia Civil, José Manuel Santiago. El general afirmó con rotundidad que los guardias civiles especialistas en las redes sociales trabajan en dos direcciones: una a través de la Jefatura de Información, con el objetivo de evitar el estrés social que producen esta serie de bulos y, la otra -que se las trae- en "minimizar ese clima contrario a la gestión de la crisis por parte del Gobierno".

Marlaska -ya con traje negro, como los demás ministros que lo acompañaban en elParte, indicio de que más adelante añadirán la corbata negra-, salió del paso como pudo -que pudo mal-, aduciendo que "ha debido ser un lapsus del general". Y luego nos largó una arenga sobre la libertad de expresión, en la que se tienen que considerar aludidos el comunista elViceDos y el director del Centro de Investigaciones Sociológicas, el socialista genuflexo ante la "Voz de su amo", Tezanos, que entrambos han pretendido pisotear un "pilar básico del Estado de Derecho" estos días atrás, con el consentimiento, por supuesto del mando único, es decir el indecente presidente Sánchez. Hasta ha habido quienes han considerado un Golpe de Estado las posturas de ambos dos, y del tercero, en relación a la censura y la libertad de expresión.

No se quedó para atrás la ministra de la Defensa, Margarita Robles -proveniente del estamento judicial, como Marlaska- en la defensa de la libertad de expresión. ¡Faltaría más! Con lo que corroboraba el ataque implícito, igualmente, a elViceDos comunista y al socialista que cuece en su olla particular las encuestas del CIS, que pretenden acallar a prensa y periodistas, sea como sea. No soportan las críticas, ni las preguntas indiscretas y mucho menos las investigaciones.

Todavía no se ha oído que el general Jefe del Estado Mayor de la Guardia Civil, general Santiago -que se supone que no es un cualquiera- se haya retractado de sus afirmaciones o que haya pedido disculpas por haber tenido un lapsus, como cree Marlaska que así ha sido. O el general se retracta y seguramente lo cesan -o lo cesan igualmente-, o el que debería dimitir es el ministro Marlaska y, por extensión, la ministra Robles y, en consecuencia el presidente del Gobierno. O es Sánchez el que cesa a todos: al general y a los ministros Marlaska, Robles, elViceDos y al director del CIS, Tezanos. Habrá que esperar acontecimientos, si es que se producen.

Pero, como es probable que nada de eso se vaya a producir, nos quedamos como estamos, y, ojo, porque todo ello va contra libertad de expresión y mucho más allá. También nos quedamos con el bulo de la ministra de Defensa, que ni se inmutó cuando afirmó que en la crisis habían participado cien mil efectivos del Ejército, cuando los efectivos del Ejército lo conforman un total de ciento veinticinco mil. Pues, miren esto ya ni es bulo, es una trola de la ministra, que no hay quién se la crea. Ésta, como Marlaska, se debe de pensar que somos tontos.