Ayuso, no digas que no te aviso

La está pifiando Ayuso en Madrid. ¡Parece mentira, con lo y por lo que ha tenido que pasar esa comunidad autónoma a causa del coronavirus y con el confinamiento! Y se niega a exigir el uso de las mascarillas en todas partes, incluida, por supuesto la calle. El número de contagiados aumenta, y aumentará en un futuro con el coladero del aeropuerto de Barajas, que tanto exige Ayuso al Gobierno que tome medidas más efectivas con las llegadas de pasajeros. Cuando se quiera dar cuenta Ayuso puede que la comunidad esté entrando en un pozo sin fondo. Solo tiene que mirar al norte, a Aragón y a Cataluña, a un paso del confinamiento.

La verdad, no se entiende que Ayuso se muestre remisa a la implantación obligatoria de la mascarilla. Por lo menos, debe una explicación a los madrileños y a todos los que viajamos a la capital del reino. No vale con decir que se aconseja su uso y que los ciudadanos están concienciados. Si lo están, como dice, no les va a molestar una orden que obligue a su uso continuado. Cierto que la mascarilla no es la panacea contra el bicho, ni mucho menos, pero sí ayuda a disminuir el contagio, sobre todo el proveniente de aquellos que no están concienciados.

No es Ayuso tan inepta e incapaz como el neandertal de la Generalidad. Por esa razón extraña mucho más aún que el Gobierno autonómico madrileño no imponga por decreto el uso de las mascarillas en la calle. Sánchez, su enemigo mortal, está al acecho y se cebará con Madrid, como lo hizo durante el confinamiento, y como lo está haciendo ahora con el neandertal catalán. Aunque ahora, con razón, le ha pedido desde Moncloa que "cierre" Cataluña, cosa que el nazi, inútil e incapaz, debería haber hecho hace una semana o más, porque todo el país está corriendo el riesgo de los contagios provenientes de Cataluña, contagios que van en aumento de manera desmesurada y tremendamente peligrosa.

Esta desbordado el nazi catalán, y por eso cada día sus ataques son más furibundos contra la Monarquía, para tapar el caos catalán. Se está dando cuenta, eso parece, de que no proviene de una raza superior, más bien todo lo contrario: es un verdadero inútil. También por eso está provocando la unión de las fuerzas independentistas para consensuar la celebración de un referéndum, otro más, otro UnoaCero, con el fin de desviar la atención de la tragedia que se está extendiendo por toda la comunidad a causa del aumento imparable de contagiados por el coronavirus, debido, principalmente, a la ineptitud de un presidente autónomo incapaz de gobernar. 

Ha aprovechado a hacer ese llamamiento el neandertal el mismo día en que el Tribunal Supremo ha decidido dejar sin efecto el artículo 100.2 de prisiones, por el que la Generalidad catalana concedió la libertad a laForcadell -la de ¡Viva la república!-, aunque ésta, como los demás golpistas condenados se encuentran en una fase superior a la que ha fallado el Supremo, que no obstante acusa a la Generalidad de "fraude de ley". No se mueve nada de momento, pero es un indicio más que razonable para intuir que el Supremo podría anular el tercer grado que la Generalidad ha otorgado graciosamente a  los golpitas, con lo que todos, sin excepción, deberían volver a prisión, si antes no ha habido fugas. Y punto. Porque ya era hora de que reaccionara el Supremo, porque lo que el neandertal está haciendo no es un "fraude de ley", sino descojonándose de la Sala II del Supremo.

El que ya no se ríe tanto es el payaso comunista Jócker. No, no. Se le están complicando mucho las cosas. Además del "caso Dina-Iglesias", en el que el juez Castellón está apunto de emplumarlo, en el Consejo de Ministros le están saliendo moscas cojoneras, que llevan el aval del propio presidente del Gobierno. No quiere el comunista negociar los Presupuestos Generales del Estado con nadie: ni con los Ciudadanos de Arrimadas, ni con los de laPepé de Casado. Es tan tonto que ni se ha dado cuenta de que el "exito" de Sánchez en la Unión puede ser el principio del fin de su caída, más todavía que la de Galicia y las provincias vascas.