Monedero, con el corazón "partío", deja la cúpula de Podemos

Monedero ha dimitido de todos sus cargos en Pueden. ¡Una crónica anunciada! Me extrañaba que aguantara tanto. Que es que han sido dos desplantes y un desaire "mugrandes", delante de todo el mundo, los que le han hecho los otros dos, porque, en principio, eran tres. Y ya se sabe que si nunca segundas partes fueron buenas, pues peor tres, que esas eran las hijas de Elena, y ninguna de ellas era la mejor. Así que reventó Monedero, por donde sea, pero reventó. Ahora dice sentirse "engañado y traicionado" y que él es más de "Galeano" que de "Juego de Tronos". Pues, a ver, a mí me gusta más esa de la de "El Príncipe", la del barrio de colorines de Ceuta. Oye cada uno con sus gustos, o su tema.

Claro, hombre, si lo dejaron solo -elBarredor y elPesetero- ante la "canallesca" -que es lo mismo que decir ante todo el país- el día en que presentaba la factura bolivariana de los cuatrocientos y tantos mil euros por el asesoramiento. Lo cierto es que no se entendió nada de lo que dijo, principalmente porque "el pobre" no sabía ni lo que estaba diciendo, mientras que los otros dos, circunspectos, lo escuchaban desde la primera fila. Y luego, como quien dice hace dos días, él solito presentando el libro -que alguien ha debido escribir- sobre su persona. Los otros dos ni se molestaron en asistir al acto. ¡Total, si ya lo conocen más que de sobra; no tenía sentido que les dieran la barrila con más de lo mismo! Bueno, pero una cosa es una cosa y otra cosa es otra.

El desaire se lo llevó cuando estaba más que convencido de que iría como candidato a la Comunidad de Madrid. Pero es que le dijeron que no. Bueno, que no que no, no es que le dijeran que no, sino que había que esperar tiempos mejores, que para el caso es lo mismo: que no, por activa y por pasiva. Si es que ya se lo dijimos hace unos meses y no nos hizo caso: !Tente, Monedero, tente! De aquellos barros, estos lodos. O no.

Esta el hombre, Monedero, que lo vierte contra los camaradas de la cúpula de Pueden: por salir en la tele se cuagüan patas abajo y por un "selfí", qué no darían por un "sefí". Además que es que se están ablandando. ¡Coño, que esto no era lo previsto! Él quiere que se siga fiel al espíritu del 15M, pero ese espíritu ya voló. Y que hay que estar más cerca del pueblo, de los círculos, que para hacer la cuadratura del círculo ya hay otros. Y que sí, que está bien asearse, pero sin pasarse, que para eso también hay otros.

Monedero, reconoce que Iglesias, -elBarredor- sigue siendo el Rey, bueno el centro, quería decir el jefe o acaso el más carismático del partido, quizá el más polifacético, porque sirve para lo uno y para lo otro. ¡Jopé! Pero quítame "pallásaspajas" al señorito Errejón y a la "encuestera" Bescansa. ¡Dos verdaderos demonios! Están pervirtiendo al jefe, y como no se deja -que ya tuvo bastante con lo de la separación de laTania-, "velahí" las tiranteces. Es que se han olvidado de dónde vienen y no saben en dónde se van a meter, como le pasó él, a Monedero; además, se miran en espejos que han debido comprar, y no se quieren ver en los de "a gratis" de los escaparates, según se pasa.

Así que, ya se sabe, los otros dos estaban hoy que ardían con el otro. No por nada, sólo que a fechas vistas de las elecciones -si ya iban mal- se la ha vuelto a armar, como con los dineros de Venezuela, o la provocación a Montoro -eso no se hace, esos no se dice- en la Puerta del Sol, o la instigación al "suicidio" -¡que se muera ella!- a la bancaria europea. ¡Mecachis, y eso que se le puede considerar el padre putativo del invento!

Hoy, cansado y abatido, engañado y traicionado, Juan Carlos Monedero declina iniciar una nueva batalla. No está, por el momento, para más guerras, por lo que ha decidido recluirse, una vez más, en los su túneles del Medro de Madrid, en donde como siempre en circunstancias similares ha sabido encontrar el sosiego y la paz. Pudiera ser que allí se encuentre con el ministro de Justicia, señor Catalá, reflexionando sobre sus sandeces. No digo que no. Y por estar implicado en el cese del director de "El Mundo", Casimiro. Eso ya no lo sé.